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La incertidumbre, inseguridad e indignación que rodeó el secuestro y crimen de Gustavo Marcelo Rivera envuelve también, a su comunidad y familia “ hasta la fecha no existe información por parte de la Fiscalía, que me permita saber que han investigado”, aseveró Miguel Rivera.
La mañana del 18 de junio de 2009, Gustavo Marcelo salió de su pueblo a Ilobasco, en el trayecto suben unos jóvenes amigos del ambientalista y director de la Casa de la Cultura de San Isidro Cabañas, con los que conversa animadamente hasta que recibió una llamada a su teléfono celular.
Responde y acuerda con el interlocutor desconocido un lugar, se despide de sus amigos, baja de la unidad de transporte y desaparece. Quince días después de una búsqueda incesante de familiares y la comunidad, lo encuentran asesinado en un pozo con signos evidentes de tortura.
El caso judicializado en la Fiscalía General de la República, no ha dado los frutos esperados por esta comunidad, que no pierde la esperanza del “acceso a la justicia”, en el caso de Marcelo Rivera.
“Lo que es peor es que cuando busco que me expliquen, qué ha sucedido con la investigación de mi hermano, los fiscales evaden su responsabilidad de informarme, esto es lo que ha pasado a un año de su muerte”, comentó.
El asesinato de Gustavo Marcelo Rivera dio la vuelta al mundo, muchas organizaciones sociales nacionales e internacionales, incluso Congrecistas de los Estados Unidos se pronunciaron por una ágil investigación y repudiaron el hecho que fortalece la impunidad en el país.
La teoría de un asesinato por la “violencia delincuencial” que apoya la corporación policial y el ente fiscal, es rechazada por familiares, comunidades y organizaciones jurídicas que acompañan a la Asociación Amigos de San Isidro, Cabañas (ASIC), que fundó Marcelo Rivera.
Héctor Berríos, de MUFRAS, abogado y querellante en el caso de asesinato, reiteró la demanda de investigar los elementos relacionados con la labor del ambientalista en contra la exploración minera que administra en el municipio de San Isidro Cabañas, la transnacional Pacific Rim.
“La Fiscalía General de la República es la institución encargada de velar por los intereses del Estado y la sociedad, dirigir la investigación y promover la acción penal, y según la Constitución es el único ente a cargo de la dirección funcional de la investigación y el impulso de la acción penal y no ha demostrado ni voluntad, ni capacidad real para aplicarla”, dijo.
Las amenazas anónimas y públicas contra los miembros de la ASIC , familiares de Marcelo así como, a los periodistas de Radio Victoria, y la posibilidad del sicariato en el deceso de Marcelo Rivera no han sido suficientes argumentos, para que la Fiscalía investigue en esa línea comentó Miguel Rivera.
“Mi hermano fue asesinado por su trabajo en contra de la minería y por la protección del medio ambiente del municipio de San Isidro, que lo sustenta la investigación realizada, por nuestros medios que busca encontrar no solo a los autores materiales sino también a los autores intelectuales de este horrible crimen”, comentó.
El reto de la familia, comunidades y organizaciones será fortalecer la transparencia en el manejo de la investigación, dada a la complejidad del caso, afirmó Miguel Rivera.
“Las autoridades encargadas de investigar Fiscalía y la división de Crimen organizado están llamadas a garantizar el acceso a la justicia a las víctimas, por eso daremos seguimiento a las acciones emprendidas en los tribunales, en los medios nacionales e internacionales”, expresó.
Héctor Berríos reiteró: “Gustavo Marcelo Rivera Moreno, ha sido considerado el primer mártir, asesinado en la defensa del medio ambiente, un ciudadano que dedicó su vida a la organización comunitaria, y muchas de las cosas que hoy existen en su pueblo son producto de sus sueños, que hizo realidad enseñando a los jóvenes a luchar por sus ideales”, puntualizó.
Redacción Co Latino
